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Obtener Ciudadanía Portuguesa por origen Sefardí

Ciudadania por Origenes Sefardi

Los judíos sefardíes fueron expulsados ​​de España u obligados a convertirse al catolicismo desde 1492 por los Reyes Católicos.

 

La nacionalidad portuguesa se puede otorgar a los descendientes de judíos sefardíes portugueses, que después de salir de Portugal, debido a la persecución religiosa (1496-1821), mantuvieron vínculos con "comunidades organizadas" típicamente portuguesas, como las que existían en Salónica y Esmirna antes de ser diezmadas por la Shoah (KK Portugal, KK Portugal Velho, KK Lisboa, KK Évora, etc.); o tenía vínculos con las sinagogas española y portuguesa en Londres, Amsterdam, Curaçau, Surinam, etc .; a solicitantes cuyas familias una vez abandonaron la Península Ibérica (Portugal y España) y durante siglos han estado integradas en comunidades portuguesas y españolas, comúnmente conocidas como "sefardíes" (Turquía, Grecia, ex Yugoslavia, Marruecos, etc.), plagadas de matrimonios entre Judíos de origen portugués y judíos de origen español que usaban el idioma ladino (una mezcla de portugués y español con idiomas locales): y a todos aquellos descendientes de judíos sefardíes portugueses que, después de salir de Portugal, debido a la persecución religiosa, viajaron a todas partes, ya sea de forma organizada o no.

 

Por ley, España quería reparar un daño histórico. “Portugal es la opción para todas aquellas personas que no pudieron completar el trámite de nacionalidad española y están interesadas en tener un pasaporte europeo, siempre que puedan acreditar su origen sefardí. Más de 132.000 personas de diferentes nacionalidades, en su mayoría de países latinoamericanos como Venezuela , México, Colombia y Argentina, Perú, Chile han solicitado obtener el beneficio.

 

Algunos de los beneficios obtenidos del pasaporte portugués:

 

Libre circulación dentro de la Unión Europea.

Viaja, estudia o trabaja en cualquiera de los 28 países de la Unión Europea.

Acceso a los derechos europeos (participación en la vida política, pensiones, seguridad social, entre otros). No te obliga a renunciar a la nacionalidad de origen (mantiene los derechos de tu país de origen o residencia).

Como portugués, no es necesario obtener una visa para ingresar a 83 países.

El 27 de febrero de 2015, el gobierno portugués publicó el Decreto-Ley No. 30-A / 2015, que faculta a todos aquellos que demuestren tener ascendencia sefardí, la tramitación de la nacionalidad portuguesa independientemente de si lo son actualmente o no.

 

Territorio portugués La solicitud de la nacionalidad portuguesa por origen sefardí es más sencilla y se diferencia del proceso de nacionalidad española en que:

 

-La ley portuguesa no requiere que el solicitante hable o sepa el idioma portugués y no requiere una prueba de idioma o cultura.

-La persona no está obligada a viajar a Portugal para firmar el acta de notoriedad, ya que la ley permite que se designe un apoderado para la firma.

-La ley no tiene fecha de caducidad, lo que implica que las personas podrán realizar este trámite cuando lo deseen sin preocupaciones adicionales debido a la limitación de tiempo.

-La ley no otorga la ciudadanía a los hijos menores de edad que hayan nacido antes de que el padre o la madre sefardí obtuviera la nacionalidad portuguesa.

-¿Cómo sabes si alguien es descendiente de sefardíes originario de Portugal? Lo primero a tener en cuenta es que la denominación de "judío sefardí" se refiere a las comunidades judías de la Península Ibérica, Portugal y España.

 

El nombre Sefarad significa "Hispania". Portugal era un país de grandes comunidades judías. En 1492, cuando a los judíos sefardíes se les dio tres meses para abandonar el reino, Portugal aplicó una política contraria de acogida y protección. La mayoría de judíos de lo que era España se refugiaron y se establecieron en Portugal. Como reacción a esta inmigración, el rey Manuel I, que inicialmente había emitido una ley que garantizaba su protección, ordenó en 1497 la expulsión de todos los sefardíes que no solicitaran el bautismo católico.

Muchos de estos judíos portugueses y cristianos conversos lograron huir y establecerse en algunos países mediterráneos como Marruecos, Francia, Italia, Croacia, Grecia, Turquía, Siria, Líbano, Israel, Jordania, Egipto, Libia, Túnez y Argelia; o Ciudades del norte de Europa como Londres, Nantes, París, Amberes, Bruselas, Rotterdam, Amsterdam, Glückstadt, Hamburgo y Colonia, y en otros países como Brasil, Venezuela, Argentina, México, Antillas y Estados Unidos de América, entre otros.

 

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